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En 2024, mi corazón lloraba y no tenía ni idea de por qué.

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El dolor era extraño, irracional y más físico de lo que jamás había sentido.

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"Es como hielo rompiéndose, Rosie", me dijo mi acupunturista, mientras escaneaba mi pecho.

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Tardé varios meses de escritura continua y muchas conversaciones en descubrir las capas de quién y qué estaba sentado en el centro de mi corazón. Se había roto, y era por una historia que nunca había sido sentida. Una narrativa nunca procesada. Un lugar nunca visitado.

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Y, sin embargo, una vez que la tristeza dijo "HEY" como es debido, también lo hicieron la alegría, el placer y la gratitud. Mi espectro emocional se volvió más rojo, más fuerte, y así, también aparecieron otros colores.

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La poesía siempre ha sido el lenguaje del corazón, y es justo darle la oportunidad de hablar y expandirse. De lo contrario, corremos el riesgo de que nuestro dolor se derrame en otras áreas de nuestras vidas. Primero se manchan el cuerpo y la mente, y desde ahí, todo tipo de lugares vulnerables.

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Decidí empezar Hey Heart Poetry porque todos necesitamos espacios para mostrarnos. Para dar espacio a nuestras vulnerabilidades y compartir nuestros propios lenguajes del corazón, sin importar cuál sea nuestra lengua materna o de qué países vengamos.

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Hey Heart tiene su corazón en el ambiente internacional de Palma de Mallorca y se extiende hacia el de su hermana, Barcelona. La magia ocurre cuando el inglés, el español y el catalán se encuentran. 

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Por todas las historias y heridas que existen entre estos idiomas, solo puedo esperar que la poesía encuentre una forma de unirnos. Si te preocupa no comprender algo en uno de los tres idiomas, será  tu mente quien está hablando.

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Tal vez valga la pena intentarlo con el corazón.

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Rosie x​​​​

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